Muy interesante el tema de los catalizadores e inhibidores.
Si pudiera definirlo, diría que las ganas de superarnos a nosotros mismos es el catalizador más poderoso, mientras que el miedo a cambiar es el inhibidor más poderoso. ¡No es cosa sencilla!. Cuando cambiamos una parte de nosotros es depojada como una piel, aquella persona temerosa que se encarnaba en nosotros perece para dar lugar a una persona diferente, más apta para afrontar los problemas que la requieren.
Te deseo mucho éxito en tu carrera. El mundo necesita mucho de personas como tú.
¡Un fuerte abrazo!