Pienso que todos somos incongruentes de alguna manera, es sólo que creo que es mejor mantenernos en silencio para que no se note tanto.
Sí vale, es triste. Recuerdo que antes de los resultados de la última competencia, charlé con el equipo de mi hija y les dije que si no ganaban, que no se afligieran que ellos habían hecho su mejor esfuerzo y estábamos orgullosos de ellos, que reconocieran el triunfo del equipo ganador con alegría y los felicitaran. Ellos con sus lindas caritas asintieron con una sonrisa en sus labios y me dijeron que estaban de acuerdo; pero ganaron.
Siempre les he enseñado a mis hijos a mantener la humildad y reconocer la victoria del otro, así no les parezca justa, porque no somos jueces y la vida sola se equilibra, no es necesario estar peleando por nada, si algo es par ti, lo tienes, sino, no lo es.
Un gran abrazo amiga.