Recuerda:
Me gustaría proponer un juego, con cada uno que lea esto, con la debida atención y respeto que se merece y conteste dentro de su mente las preguntas que van surgiendo con total honestidad. Así, juntos podremos transitar el camino hasta el final de dicho juego y por supuesto ganar.
Primero: ¿A quien amas tanto, o más que a ti mismo? vamos, encuentra su nombre. Buscá, piensas en esa persona tan especial diariamente, es parte de tu vida, aunque no esté presente. Obvio que tiene que ser alguien vivo, confío plenamente en que ya lo tienes, para poder proseguir con el juego si así tú lo deseas.
Ahora, imagínate por un instante dos edificios gemelos de más de 200 pisos enfrentados, pero cada uno a un lado de una ancha avenida de 6 carriles. En la altura de la azotea están unidos por un puente metálico con barandas a los costados para agarrarse con ambas manos y poder mantener mejor el equilibrio.
Abajo, reporteros de todo el mundo, el puente es probado ante la vista de todos por un bombero, un clima perfecto, servicios de emergencia en total atención, escuadrón de rescatistas en helicóptero y a vos te proveen una mochila con un paracaídas de practicar ala delta, y te ofrecen 500 dólares estadounidenses, pasaje ida y vuelta, hotel y comidas.
¿Vas y cruzas? Responde, sinceramente y seguro sin dudas, ¿Sí o no? ¿Ya tienes tu respuesta?
Entonces, prosigamos. Imaginemos los mismos edificios gemelos con más de 200 pisos enfrentados, uno a cada lado de la avenida de seis carriles. Olvídate del puente metálico con barandas, ahora es un tablón grueso de albañilería.
El clima cambió y hay una tormenta de viento y aguacero muy fuerte. Obvio que nadie quiere probar la seguridad del cruce, no hay medios de comunicación, tampoco servicios médicos ni de rescatistas. Vos no tenes la mochila paracaídas y al tablón hay que cruzarlo en posición cuerpo a tierra o gateando como los bebés porque si te paras el viento te arrastra hasta empujarte al vacío.
Pero del otro lado, en el edificio de enfrente, un loco asesino sicópata tiene por los pelos en la orilla enfrentada al tablón a tu ser querido y te grita: "Que si no cruzas lo suelta al vacío" (papá, mamá, hijo, hermano, pareja, abuelo, amigo...). ¿Crusas? De nada sirve, hablarle bonito, está re loco y lo matará.
Por eso, ¿vas o no vas?
Buda decía: "Hay de aquel que sus palabras sean mejores que sus hechos"
Y Jesús decía: "Por sus hechos los conoceréis".
Si lo harías sin importar lo que pase, "ganaste", porque cuando creas que abandonaras tus metas hacía la felicidad total, nadie te está viendo.
Recuerda que esa personita que tanto amas cree en ti feacientemente y aunque te perdone todo, le duelen tus fracasos como si fueran propios. ¿Cómo lo mirarías a los ojos y le dirias: "Perdón, hoy decidí no salvarte?"
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