Recuerda:
"Si estás intentando conseguir trabajo por primera vez, permíteme ayudarte en esta complicada tarea. Alguien que ya no está entre nosotros me dijo alguna vez:
"Bien, primero levántate temprano, báñate con agua lo más fría que tu cuerpo soporte para sacarte todo indicio de somnolencia, o sea, recupera tus 5 sentidos para estar bien atento. Péinate y vístete como le gustaría verte a una persona que te va a contratar para ser encargado de su negocio: una camisa clara, si es posible lisa, un pantalón formal y un par de zapatos. Desayuna algo y busca la avenida más transitada de tu poblado y ve caminando hasta un extremo de ese lugar.
Empieza a entrar uno por uno a los negocios, pidiendo hablar con el jefe de personal, encargado o dueño, por algo sumamente importante. Cuando lo tengas de frente, sé supereducado, saluda cordialmente y dile que te encuentras abocado a la tarea de ayudar a tus padres con los ingresos, por lo cual es preciso que consigas trabajo de lo que sea: limpiar, repartir volantes, hacer mandados. Que aprendes rápido y si está en su voluntad, poder ayudarte.
Si te preguntan cuánto pretendes ganar, dile que sincera y honradamente no tienes ni idea y es él quien decidirá cuánto puede pagar. Espera la respuesta. Si es sí, pregunta qué debes hacer. Y estate dispuesto a pagar tu derecho de piso, o sea, el primer tiempo suele ser duro, pero todo irá mejorando día tras día.
Si es no, al próximo y al próximo hasta que se abra la puerta de ingreso.
Ahora sí, ya eres adulto. Es hora de ir a visitar amigos y preguntarles en qué están trabajando y cómo hicieron para entrar. Ambos métodos están comprobados y funcionan un ciento por ciento. ¡ÉXITOS!"